El tiempo K impuso miradas, discurso, iniciativa y opciones sobre los modos de CONSTRUIRNOS

"El peor analfabeto es el analfabeto político. No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el costo de la vida, el precio de los frijoles, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas. El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales" . Bertolt Brecht. (1898)

miércoles, 17 de octubre de 2012

Los diarios del 18 de octubre del 45

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“Los hombres y mujeres pobres que habían vivido a los márgenes de la coqueta Buenos Aires habían invadido la ciudad. Ellos, que se habían acostumbrado a andar discretamente como para no ser notados sin un día tenían que pasar por el centro. El 17 y 18 de octubre de 1945 habían conquistado esa ciudadela blanca y de “buena presencia” que de mil maneras les hacía sentir que no era suya. Llegaron con sus ropas pobres y sus modales groseros y, contra todas las reglas de urbanidad, retozaron en las plazas con sus cuerpos sudorosos a la vista, y refrescaron sus pies en el agua de las fuentes. Y como ese día la victoria fue suya, y como se sintieron mirados con desdén por el público que los veía pasar, pero bienvenidos por Perón cuando por fin apareció en el balcón de la Casa Rosada, en adelante ya nunca más pidieron permiso”.

Es copia: ADAMOVSKY; Ezequiel – “Historia de la clase media argentina” – Ed. Planeta – 2009.- Pág.266.


Dice el mismo autor sobre repercusiones: 

El diario Clarín:
  • notó con asombro que allí estaban ellos, exhibiendo sus pieles oscuras o atreviéndose a hablar en “quechua o guaraní” en la europea ciudad porteña;
  • que en los sitios de recreo popular de Palermo, habían dejado de bailarse los ritmos ¡que gustaban a los inmigrantes, reemplazados por los gatos, zambas y chacareras que preferían los provincianos.
El diario Crítica:
  • se quejó en 1945 de la presencia de la plebe en las calles porteñas, un “atentado” contra “el buen gusto y contra la estética ciudadana afeada con su presencia”.

     
El conservador Adolfo Mugica:
  • el país vivía como en “una inmensa merienda de negros” compuesta de mestizos y aún de indios…
El nacionalista Juan Carulla:
  • como el resto de América Latina, Argentina también se “negrea”
La revista católica Criterio:
  • los alamarba no sólo “el ausentismo, las huelgas ilegales y el trabajo a desgano, sino también las manifestaciones de “indecencia y vicio”…
En el periódico del Partido socialista, Américo Ghioldi:
  • retomó la dicotomía sarmientina de “ civilización o barbarie” para llamar a combatir “esa fuerza primitiva que se había hecho visible en las masas ignorantes”.
En la revista Antinazi, Juan Antonio Solari:
  • al candombe sucio, populachero y fanático había que darle un tratamiento de agua y jabón.
El Partido Comunista:
  • salió a descalificar al malevaje peronista que atentaba contra el hogar, contra las casas de comercio, contra el pudor y la honestidad, contra la decencia, contra la cultura.
La católica Mila Forn:
  • A los demagogos les conviene hacer creer que el pueblo es la gente común y humilde de una población, porque saben que ese sector está siempre dispuesto a seguir a los poliquiteros sin escrúpulos que le hablan de una falsa idea de igualdad. Pero esa definición de pueblo no es apropiada para un País como Argentina, donde cualquiera tiene posibilidades de ascenso. En las naciones africanas, habitadas por negros, existe quizás la igualdad, pero no hay civilización, ya que ésta es siempre producto de la ambición y de la iniciativa individual.

Los cantores:
  • Alberto Castillo, un tanguero con fama de “grasa” alcanzó su máxima popularidad luego de incorporar candombes a su repertorio.
  • A Antonio Tormo lo llamaron “el cantante de los cabecitas negras” y aunque nunca fue peronista sufrió prohibiciones luego del ’55.
  • Atahualpa Yupanki, mostraba con orgullo su origen mestizo; sus canciones reflejaban las penurias de los indios y los criollos del noroeste. Fue muy polular, a pesar que no era peronista.

Los consejos de los manuales de urbanidad:
  • Respetar las jerarquías. No se debe vestir como alguien superior a nosotros, pues daríamos a entender nuestro afán de igualarnos a ellos, lo que sería altamente ridículo.
  • Es conveniente rodearse de amigos de nuestra misma condición.
Los cuestionamientos:
  • ¿De qué valía la educación cuando todos esos brutos ahora se sentaban en las bancas del Congreso? ¿para qué el esmero en el trabajo y el esfuerzo individual si ahora con los convenios colectivos y la presión sindical se duplicaban los salarios de todos?
  • Tanto cuidado en vigilar la familia cuando una hija ilegítima de pronto llega a primera dama.
  • El verdadero Pueblo argentino no podía ser ése (el del 17 de octubre): un rejunte de maleantes manipulados por Perón.

lunes, 8 de octubre de 2012

MINORIAS ¿... no las respetamos?

Las minorías que hoy se quejan de faltas de respeto, son las que no honran ni la investidura presidencial, ni a sí mismos, porque caen en la ridiculez de desearle la muerte a la Presidenta! Ahí mostraron la hilacha!!!
Por otra parte, no tienen ideales, sino solamente un odio que los hace actuar "en contra de"... Y eso no sirve, porque se convierten a sí mismos en enemigos, olvidando el verdadero rol de oposición democrática.

Veamos porqué no sirve estar en contra de todo.
Dos motivaciones mueven en general a los seres humanos: la aspiración y el temor. La aspiración se traduce en "queremos tal cosa". O sea, son los proyectos, los deseos de mejora, el trabajo concreto para superar dificultades. En cambio la motivación del temor, es la del MIEDO, es la de la impotencia para proponer o realizar actos en favor de la sociedad... Por eso dicen: "NO a CFK", NO a la inseguridad", NO a la re-reelección", etc. Pero... ¿SÍ a qué? A nada?
Las manifestaciones caceroleras, protagonizadas por las clases acomodadas, presuntas minorías "no respetadas", se justifica en que ellas son o se identifican con las clases dominantes, son las que habitualmente imponían una visión del mundo, de los roles sociales, del lugar de c/u... Y eso se llama VIOLENCIA SIMBOLICA (ver teoría del sociólogo francés Pierre Bourdieu). Violencia que pasa desapercibida a veces, porque se halla naturalizada. Pero OJO! Que cuando llegan los K se acabaron las relaciones de poder tal como habían sido siempre, o casi siempre...
Esa dominancia pretenden recuperar los caceroleros. Se escudan en un principio que es cierto, el respeto de las minorías, mientras quieren instalar una imposición ARBITRARIA, que argumentan en un consenso, que no es tal, sino de pequeños grupos, aislados, fragmentados, sin ideales.

Respeto cualquier reclamo o cualquier pensamiento diferente al que poseo, o poseemos los que elegimos a Cristina hace un año. Respeto las minorías, y me interesaría escuchar propuestas... De hecho, este Gobierno escucha ¿acaso no dicen los de la Coalición Cívica que de ellos era la idea de la Ayuda Universal por hijo? Bueno, Cristina escuchó, y concretó la medida.
No tenemos que aceptar que intenten dominar. Las medidas políticas las toma la mayoría: el Pueblo que votó a Cristina para que lleve a cabo las medidas que quieren los ciudadanos, y que benefician a todos, a los 40 millones de argentinos.